Playa Luna tiene concesión

Desde el pasado 15 de diciembre empezó el periodo en que el la Organización manejará Playa Luna en este verano. Entre las mejoras que se realizarán incluye la instalación de baños y un salvavidas.

Este verano Playa Luna prepara varias novedades. La principal y más vistosa es que esta temporada la playa será manejada por la Organización Playa Luna, principal impulsor del nudismo en el país. ¿Qué significa esto? Que la playa estará concesionada y que se implementarán varias mejoras.

René Rojas, Director de la Organización  Playa Luna, lo explica: “Una de las principales preocupaciones es poner baños. También habrá un salvavidas para resguardar la seguridad de todos los bañistas, además de ciertas obligaciones que pide la Gobernación Marítima por tener la concesión, como colocar carteles y hacer respetar del decreto que prohíbe el camping, entre otras cosas", recalca Rojas.



Entre otras mejoras, Rojas espera fomentar el turismo en la playa. “Una de las actividades que potenciaremos será el turismo. Vamos a buscar la colaboración de privados para que la playa reciba a más visitantes”, cuenta.

No es primera vez que la Organización Playa Luna recibe la concesión del balneario, pero Rojas aclara que la anterior oportunidad “no pudimos hacer todas las cosas que queríamos”.
El próximo viaje organizado a la playa será realizado a la vuelta de las fiestas de fin de año; el domingo 8 de enero.


El nudismo me ayudó finalmente a amar mi cuerpo

Por Kerry Hiatt (Original publicado en The Guardian)

Cuando mis amigos me hablaban del primer hotel balneario naturista de Gran Bretaña, en Birmingham -Spa Trébol, que abrió sus puertas en marzo- Yo no podía dejar de reír para mis adentros mientras expresaban  su horror ante la idea de unas vacaciones al desnudo. Hablaron de las molestias de tener pedacitos quemados por el sol y se estremecieron ante la idea de desnudar su cuerpo ante todo el mundo. Lo que no sabían que yo ya había estado en un balneario naturista, y me encantó.
Siempre he sido insegura sobre mi cuerpo. De hecho, durante el primer año de nuestra relación, nunca mi esposo me vio desnuda en la luz del día. Por las mañanas, cuando tomaba una ducha, bajaba las persianas del baño para dejarlo en una semi penumbra. En el dormitorio, ponía luz de velas.
Aunque pueda parecer una tontería para algunos, en aquel entonces, mi cuerpo se sentía como de pesadilla -Tengo estrías, hoyuelos y un montón de pedacitos flácidos.

En un buen día, al verme desnuda me daban ganas de a ir al gimnasio antes de ir al trabajo. En un mal día, verme desnuda me hacía caer en una espiral de depresión.

A un año de nuestra relación, Joe y yo nos casamos en la casa de su padre en Florida. Seguramente ahora que nos casamos, me sentiría más a gusto. Pero no lo estaba. De hecho, estar en Florida empeoró la situación.

Mientras que su  familia retozaba en la playa en bikinis diminutos y trajes de baño, yo yacía en una de las hamacas, sudando bajo una falda larga y una camiseta. Joe estaba preocupado por mis inseguridades, sin embargo, me llenaba de elogios -incluso cuando sentí que estaba en mi peor momento- y me decía lo hermosa que me encontraba. Yo le creía, pero no pude vencer mi fobia. Hasta que probé el nudismo.
Siete meses después, estábamos de regreso en Florida y pasamos por delante de un hotel del tipo "ropa opcional". Yo no podía dejar de preguntarme lo que pasaba ahí dentro.
"¿Alguna vez has estado allí? Le pregunté a Joe. -No- sonrió. "¿Quieres echar un vistazo?”
Por supuesto, él esperaba que yo declinara  su invitación. Sin embargo, mi interés se despertó. Tal vez me ayudaría a ver a otras personas a gusto con su cuerpo. 

"Yo no tendría que desnudarme por completo", decidí antes de tomar una decisión. "Vamos a hacerlo," asentí.

Cuando nos detuvimos y abrí  la puerta del coche, vi a tres señores mayores caminando hacia mí balanceando sus raquetas de tenis, vestidos sólo con brillantes zapatillas blancas. Parecía como si no tuvieran ninguna preocupación en el mundo A continuación, dos señoras en sus 30 años pasaron en un carrito de golf sin nada más que sus gorros.
La recepción parecía la de cualquier otro hotel bien equipado y el personal era muy amable. Le expliqué que estaba interesada en visitar, pero tenía ciertas aprehensiones sobre el concepto del nudismo. La recepcionista sonrió y me dijo que la gente podía andar vestida, o desnuda, como se les antojara. Empujando dos pases liberados por el día hacia nosotros, nos pidió que probáramos por nosotros mismos y nos explicó un par de reglas básicas.
Ningún tipo de conducta sexual era tolerada y siempre debías poner una toalla antes de sentarte.
Antes de darme cuenta, estábamos comprando dos toallas y dirigiéndonos hacia la zona principal del resort.
Hombres y mujeres de todas las formas y tamaños descansaban en la piscina sorbiendo bebidas, mientras que otros jugaban deportes de equipo o charlaban. Vi estrías, hoyuelos, líneas de bronceado y un montón de carne suelta, al igual que yo. La diferencia estaba en que a esta gente no le importaba.
A medida que el sol caía sobre nosotros -yo estaba vestida de la cabeza a los pies de negro- Joe me miró. “¿Qué piensas?”, preguntó. Medité un momento antes de dirigirme hacia dos tumbonas en la piscina, y luego dije: "Creo que debemos sacarnos nuestra ropa."
Aunque nerviosa, no me sentí incómoda. Poco a poco, salí de mi ropa, y por un angustioso minuto mientras estaba desnuda de pie al lado de la silla reclinable, miré las caras de los demás para ver si se reían de mis partes fofas y tambaleantes.
Para mi sorpresa, ni un alma ni siquiera echó una ojeada hacia mi.
"Tu turno", le dije a Joe. Enarcando las cejas, una sonrisa cruzó su rostro cuando se despojó también de sus ropas.
Pusimos las toallas antes de recostarnos y disfrutar del sol. Sentí una descarga de embriagadora libertad. La sensación de sentir el sol en mi piel desnuda era demasiado deliciosa para expresarlo en palabras.
Durante tantos años me preocupaba lo que otros pensaran de mí. De pronto me di cuenta de la enorme pérdida de tiempo que había sido.

A medida que comenzó a hacer más calor, Joe y yo nos aventuramos en la barra para pedir algunas bebidas y alimentos. A pesar de que se sentía extraño estar desnuda en un ambiente formal, también fue emocionante.
Después del almuerzo, nos invitaron a unirnos a un partido de voleibol en la piscina. A medida que nos metimos en el agua, no pude evitar una sonrisa al verme viviendo el cliché nudista. ¿Voleibol? ¿Desnudo?
Pero en vez de estar nerviosa, encontré la situación increíblemente divertida. Me tomó un tiempo entrar en el juego -saltar para golpear la bola sin sujetador era bastante incómodo- pero la camaradería me hizo sentir de inmediato bienvenida. Y cuando llegó el momento de irnos, estaba consternada ante la idea de tener que ponerme mi ropa otra vez. Se sentían incómodas y calientes.
"¿Me amas menos ahora que me has visto desnudo en plena luz del día? Le pregunté a Joe mientras nos alejábamos en el coche. "Te quiero más", fue su respuesta.
Desde entonces me he vuelto adicta al estilo de vida. Cuando nos fuimos de Gran Bretaña a una casa de campo española en una montaña remota, rara vez usaba ropa durante nuestra estancia de seis meses allí, disfrutando del sol en la piel desnuda. Y ahora estamos de vuelta en Greenwich, tengo la intención de visitar tantos lugares naturistas como sea posible.
Nunca habría creído una sola visita a un resort nudista podía curar mis inseguridades sobre mi cuerpo, pero lo hizo. Aún mejor, me ha transformado en una persona más segura, lo que Joe le encanta. Y ha ayudado a fortalecer nuestro vínculo.
Así que al escuchar el horror de mis amigos ante la mera idea de intentar practicar el nudismo, decidí que era tiempo para hablarles de mis variadas aventuras desnuda. Me encontré con un resonante silencio antes de que fuera bombardeada con una serie de preguntas.
"¿Alguien coqueteó contigo?" "¿Los hombres se excitan?" "¿Qué pasa con las quemaduras solares?" "¿Irías de nuevo?"
"Chicas" -les dije- "He estado viendo el sitio del Spa Clover. ¿Quién quiere ir un fin de semana? Nunca se sabe, podrías descubrir que tú también eres un nudista, sólo que no lo sabías".


Preguntas Frecuentes

1. ¿Cómo llegar a  Playa Luna? ¿Dónde está?
Playa Luna es parte de un sitio Prioritario para la conservación de la biodiversidad. Está en un lugar apartado a 5 km de la Caleta Horcón.
La visita al lugar incluye una caminata de 40 minutos por la playa a los pies de los acantilados de Horcón.
Este es el único acceso publico, libre y gratis; por razones de seguridad, cada visitante debe informarse sobre las mareas (www.shoa.cl)

2.  ¿Se puede acampar?
No, no se puede acampar, está prohibido acampar en Playa Luna.
Ordenanza Municipal - Uso del borde Costero - Municipalidad de Puchuncaví

3. ¿Puedo visitar la playa con mi perrito?
No, no se puede visitar Playa Luna con perros, ni animales domésticos, se le pide a los visitantes que dejen a su mascota en casa.

4 ¿La playa es privada?¿Hay que pagar para ingresar? ¿La playa, es de libre acceso?
En Chile no existen las playas privadas, tampoco las playas donde se pague por entrar y todas las playas son un bien nacional de uso publico y de libre acceso.

5.  ¿Puedo fotografiar o filmar en la playa?
Puedes hacerlo, pero debe ser en un lugar apartado de la playa, lejos del los grupos de persona que no den autorización para ser fotografiados.

6. ¿Puedo visitar Playa Luna con mis hijos?
La invitación es  visitar Playa Luna con la familia, los niños son bienvenidos dentro de un ambiente familiar, el Naturismo es una actividad sana, recreativa y natural.

7. ¿Qué pasa con la basura en Playa Luna?
En Playa Luna el tema de la basura es algo de mucha importancia, no existen basureros, ni tampoco nadie que se haga cargo del retiro de ella, por lo que cada visitante se lleva de regreso su propia basura, como muestra de educación y respeto por el Medio Ambiente.
Incluso los fumadores son muy cuidadosos al no enterrar las colillas en la arena, ocupando ceniceros improvisados. Manteniendo el lugar como el más limpio de la  zona.

8. Si soy de Santiago y no voy en auto ¿Cómo llego a Playa Luna ? ¿ Hay algún bus directo?
Una alternativa son los viajes organizados por Turismo Playa Luna y otra opción es a través de servicios tradicionales de buses interurbanos.

9. ¿Cuáles son las normas para estar en el lugar? ¿Existe algún reglamento de conductas en espacios Nudistas?
Existe un reglamento establecido por la mayoría de Asociaciones Internacionales de Naturismo, todo esto basado principalmente en el sentido común y respeto social.
Si quieres saber más en relación a las Normas de Convivencia ingresa aquí.

10. ¿Cuáles son los requisitos para ser parte del grupo?
Para ser parte del grupo, no es necesario ningún requisito en especial, lo importante es participar de las actividades o de alguna otra manera, hay varias formas de ser parte y colaborar.
También existe la opción de ser socio/a de la agrupación.

Para quienes realmente tengan el interés y la intención de pertenecer a este grupo que hace posible la existencia de Playa Luna como un lugar Naturista, pueden escribir a naturismochile@gmail.com, manifestando el interés de asociarse, colaborar o hacer un aporte real a esta iniciativa.





A bus completo se inaugura temporada en Playa Luna

                                                                                       Foto LUN
El día está nublado, pero eso no es un impedimento
para que más de 30 personas llegaran a las arenas de la playa a sacarse la ropa en el comienzo de esta temporada 2011/2012 de Playa Luna. El bus partió casi lleno desde Santiago, y después de un viaje sin contratiempos, llega a las cercanías del paraíso nudista.
La playa ya tiene algunas personas disfrutando del naturismo, pero con los visitantes del bus, ya se parece más a cómo se ve regularmente en los días de verano. Al poco rato, la prensa se hace presente en las arenas. El viaje quedó plasmado en medios como Las Últimas Noticias, La Estrella de Valparaíso, Chilevisión e incluso fotografías fueron recogidas por medios internacionales. Aunque ninguno de los reporteros  realizó su trabajo desnudo, fueron respetuosos con quién no quería salir en las imágenes.
Afortunadamente, durante la tarde las nubes se abren un poco y dejan disfrutar del sol, que muchos nudistas aprovechan. Aunque el agua está un poco helada, varios se adentraran en el mar. Claro que la mayoría sólo se moja las patitas y nada más.
También fue la oportunidad de muchos primerizos de conocer la experiencia de sacarse la ropa en público. “Después de esta experiencia va a ser extraño ponerme bikini”, dice Verónica. “La gente cree que esto es un grupo elitista pequeño, pero la verdad puede venir cualquiera”
Este viaje da inicio a la temporada de viajes a la  playa que cada año el Club Playa Luna realiza. De todas formas, un buen número de personas ya estaba disfrutando de la playa por su cuenta. Se espera que esta temporada sea una de las más concurridas en Playa Luna.
El próximo viaje quedó agendado para el domingo 20 de noviembre.

Consejos para los principiantes


¿Sientes curiosidad por iniciarte en el nudismo pero tienes muchas preguntas todavía? ¿No sabes cómo convencer a amigos o tu pareja? Acá esperamos dar algunas respuestas.
El nudismo o naturismo es una de las experiencias más liberadoras que puedes experimentar en tu vida. Es despojarse de muchos pesos y cargas sociales. Pero dar ese primer paso puede ser un poco intimidante. Después de todo, ¡estamos hablando de quedar en desnudo en comunidad! Lo importante es sentirte seguro. Todas las personas que practican el nudismo en algún momento tuvieron que dar ese primer paso.
Los siguientes consejos han sido recopilados y editados de diversos sitios de agrupaciones naturistas.

Es más fácil hacer el nudismo con desconocidos

Si las primeras veces tu prácticas el naturismo entre personas de su entorno (familia o amigos),  puede ser que te sientas más observado. Lo ideal sería ir acompañado de una persona más, pero nunca en patota.  Después se pueden unir más personas, pero en un principio, siempre será más fácil sentirse cómodo desnudo ante personas que no conoces de otro contexto.

¿Qué pasa si tengo una erección?

Esta pregunta es la que genera más dudas y chistes fomes entre hombres. Es común escuchar a hombres diciendo “no podría ir a una playa nudista porque tendría una erección constante”. Bueno, eso es imposible. El contexto naturista es lo menos sexual que hay, así que no hay ningún elemento que pueda excitar a alguien. Si aún así ocurriese, sería porque esa persona está pensando en sexo constantemente, y algún momento se le pasará y verá más allá. De todas formas, es una función corporal natural y a veces involuntaria. Además, este es un problema que realmente no se ve: nadie en esa circunstancia querría ser visto.

No puedo hacerlo, me siento gorda/o u inconforme con mi cuerpo

Es que entonces no entendiste para nada el espíritu naturista. La idea detrás de todo esto es aceptarse como uno es y darse cuenta que un cuerpo es sólo eso, un cuerpo.  Está fuera de la cuestión el conformarse con un estereotipo impuesto por la sociedad. Somos todos diferentes, y esa diferencia es nuestra riqueza, es lo que hace nuestra personalidad. Ser naturista es antes que nada aceptarse, estar en paz con uno mismo.

Vergüenza y pudor

Siglos de educación opresiva han inculcado que el cuerpo desnudo es vergonzoso, que la desnudez es mala, y que el cuerpo hay que esconderlo debajo de la ropa. 
Es normal al principio sentir vergüenza, pero en los espacios nudistas se está rodeado de otras personas desnudas con naturalidad. En los ambientes naturistas se crea un entorno familiar y respetuoso donde hombres, mujeres y niños se pueden sentir seguros. Cuando más tiempo se está desnudo más confianza se adquiere con el propio cuerpo.




Tercer Encuentro Latinoamericano de Naturismo 2010 (ELAN)

René Rojas, Director del Club Nudista de Chile, estuvo presente en el Tercer Encuentro Latinoamericano de Naturismo, en Colina do Sol, Brasil en marzo 2010

El  IV E.L.AN, se llevará a cabo en Playa Luna-Horcón los días 2, 3 y 4 de marzo 2012.


Algunas fotografías de lo que fue el III E.L.A.N  en Colina do Sol







Mi Historia en Playa Luna 2

Con la Marcia fuimos a lo de Spencer Tunick cuando, junto a más de 4000 personas desnudas y con -1º G., una fría mañana de invierno. Era la final del mundial de fútbol del 2002, y 4000 personas corrían desnudas y libres sin preocuparse del mal endémico de este país. El fútbol. Pero eso es tema para otra oportunidad.
Realmente quería comentar que esa vez fuimos porque la Marcia me dijo que era una oportunidad única y trascendente en la historia del país, y que seria lamentable no participar. Eran argumentos poderosos, y muy parecidos a los que uso un amigo para convencerme de ir a ver a Michael Jackson cuando vino a Chile. El asunto es que nos inscribimos para ir, y nos confirmaron altiro. Yo estaba medio dudoso en todo caso, ya que en mi familia el cuerpo era una especie de templo que más valía mantener cerrado, solo a la vista de uno mismo y la pareja. Yo nunca le vi ni una pechuga a mi mamá, y si le sumo el hecho que me amamantaron muy poco y que la sexualidad y el cuerpo humano eran tabú en mis años mozos, se podría decir que mi visión de la desnudez era bastante candida. Pero la Marcia estaba más que decidida y yo no podía flaquear ante ella. ¡Eres macho, o no eres macho! me decía la noche antes del evento. Los niños querían ir pero no los llevamos porque hacia frió y era muy temprano, así que llegamos solos porque otros que se habían sumado se corrieron a ultimo momento, y sin redundar en lo archiconocido (los canutos, la gente, y los nudistas espontáneos), la experiencia fue única, y la catarsis contagiosa, de hecho el frío ni se sintió hasta cuando nos vestimos, y solo camino a casa alguien pregunto ¿Quien gano el mundial?
A raíz de eso y algunos años después, al leer un reportaje a René Rojas (igual que el maestro Pepo) precursor del nudismo en chile, le escribí un correo contándole nuestra historia en cueros, y nos invito a participar en el club. No pudimos de inmediato por distintas razones, pero finalmente nos decidimos y se dio la oportunidad el pasado 21 de octubre, día en que inauguraban la temporada de playa Luna, con transporte y todo. Cancelamos la cuota y nos juntamos con el grupo esa mañana. Estaba nervioso, no lo voy a negar. Siempre me ha sido difícil entablar relaciones humanas y sociales, y debo admitir que si no es por la Marcia, hablaría casi nada... y ni siquiera habría ido. Pero ella me inspira, y me gusta compartir momentos a su lado. El hecho es que la Marcia estaba de lo más relajada y lo único que le preocupaba era que no consiguió café en ningún lado, lo que la irrito un poco, pero al final nos fuimos sin café pero cómodos ya que el bus era bastante agradable. Arriba iba gente de toda edad (menos niños) y todos muy relajados, saludamos y nos sentamos y cuando llego René con sus lentes CQC y su polera oficial de PLAYA LUNA, partimos. Estuvimos hablando con uno de los coordinadores (es como el 2º de abordo) pero no me acuerdo del nombre, nos contó algo de la historia del grupo a nosotros y a una pareja de lolos que también iban por primera vez. De los comienzos en la clandestinidad y la inquisición social de la que fueron victimas hasta que consiguieron la ansiada libertad de expresión. Había un tipo que la Marcia me dijo "Yo lo conozco de alguna parte... pero no recuerdo de donde" Así que le pregunto y el le dijo que había estado en un Relity del 13. Cuando me contó esto la Marcia le pregunte en que momento había ella participado en un reality. No me dijo nada. Pero el hombre Relity resulto ser bien simpático. También había un señor mayor que ya era senior en el nudismo y también es bien simpático y se llama Iván.

Cuando nos bajamos del bus nos toco caminar como 20 min. pero casi ni se notaron, pero se funó un viaje a otra playa de cerca y nos fuimos directo a playa Luna. En un principio nos instalamos con la Marcia en las periferias del grupo, junto a dos parejas más. Yo no sabia como empezar, pero a la Marcia no le costo nada, y en menos de lo que me demoro en escribir esto, ella ya estaba sin nada tomando sol. Obviamente no iba a ser menos e hice lo mismo. Y ahí viene la sensación de libertad. Una vez que uno se libera de las ataduras culturales de la vestidura, ¡Pucha que es rico! estaba al lado de mi mujer, leyendo un libro, en pelota y disfrutando del sol que ese día fue implacable (pregúntenme a mi y mi quemado cuerpo), miraba al lado y había más gente desnuda, disfrutando de si mismo y de la vida. Todos tenían eso en común. Estaban felices de estar ahí, en ese momento en ese lugar. No había diferencias de edad, ni físicas, sociales, políticas, religiosas o culturales. Éramos todos iguales, y en ese momento recordé que fue lo que mas me gusto de lo de Tunick: El mirar al lado y ver que todos éramos iguales, que todos no saludábamos porque todos nos conocíamos... o mejor, no teníamos nada que conocer porque nadie tenia nada que ocultar, y no lo digo en sentido figurado "Claro, si todos andan en pelotas", si no que, finalmente, la ropa no solo nos cubre el cuerpo, si no que además no deja ver la transparencia de este. No digo que andemos piluchos todo el tiempo, si no que seria bueno que en algún momento, todos nos plantáramos frente a un desconocido, desnudos, y viéramos que al final no somos tan desconocidos y hay cosas mucho mas entretenidas que compartir con otros, en vez de lo adquirido o por adquirir. 
Nos sacamos fotos, muchas fotos (que no publicare por respeto a mis "nuevos mejores amigos de todo el mundo") que nos recordaran la primera experiencia de este tipo en nuestras vidas, pero no la ultima, ya que el  11 de noviembre nos juntamos de nuevo en Peñaflower, y espero poder llevar a mis muchachos porque esto es una experiencia también de familia.
Finalmente, recomendaría a mucha gente hacer esto como terapia de familia, de espíritu y personal, pero de toda esa gente, ninguno lo haría... allá ellos, nosotros en cambio, recién empezamos.

                                                                                                                                       Rodrigo

Aniversario Playa Luna 11 años

30 de Enero









Mi historia en Playa Luna 1

Me imagino que para muchos mortales como Yo la época de los militares nos marco profundamente en cuanto al desarrollo como individuos toda vez que vimos pasar  de largo cosas necesarias para crecer como personas normales y que se resaltan tanto en el día de hoy sobre todo con los movimientos sociales que se están desarrollando. Da coraje ver a los jóvenes manifestándose,  y en general a cada grupo o agrupación que crea que sus derechos se están vulnerando o no son todo lo justos que debieran y que en definitiva ninguna de esas manifestaciones pude vivirlas en mi momento, no se podía hacer nada diferente a ir a trabajar y retornar a casa rogando no encontrarse con ninguna sorpresa desagradable. De tanto vivir reprimido y comprimido aparece el Señor Spencer Tunick con su propuesta de empiluchar a los chilenos, fue mi primer imaginarme de mandar todos los prejuicios a la chuña y concurrí sin imaginarme siquiera lo que ocurriría ni como me portaría, mi experiencia con mujeres desnudas se remonta exclusivamente a haber tenido encuentros del tercer tipo y por lo mismo no podía saber como reaccionaría el tener a tantas rodeándome,  de más esta decir que fue una experiencia espectacular, me di cuenta realmente que el ver gente de todos los tipos y probablemente de géneros el estar desnudos los hacía a todos iguales y no hubo ningún tipo de prejuicio, incluso con “aquel” sobre el cual tenía algún tipo de duda en como iba a reaccionar, todo fantástico,  tanto que desde ese minuto me dedique a indagar sobre el nudismo en Chile y descubrí el grupo de playa luna a raíz de una entrevista que salió en televisión de una conocida personaje y ahí me enganche con la página y comencé a participar en todo encuentro que organiza el grupo. La experiencia de la playa es espectacular, nada contable si no se está ahí, es la mejor prueba, concurrir y dejarse ser, tanta gente que en ese minuto se hace igual, es increíble el cambio que experimentan las personas, estar al aire libre con la música del mar de fondo es perfecta la comunión, tanto ajustar la camisa y el cinturón del pantalón para aminorar en algo esa guata asquerosa que se vislumbra tras la tela y en ese minuto en que está todo al aire se transforma en querer tu cuerpo y lo mejor que te das cuenta que a nadie le importa tu apariencia y capaz que ni siquiera si existes, todos disfrutan de una libertad inconmensurable y a concho, ya que seguramente para muchos durará sólo esa tarde y después deberán volver a la rutina diaria que avasalla cada día más.  
A partir de ahí es tal el cambio que se produce en mi forma de sentir el cuerpo que es casi una necesidad el andar desnudo cada vez que puedo, incluido por cierto mi hogar, ya rogaría por una ley que permita caminar libremente por donde uno desee con ropa o sin ropa y que diera lo mismo………hummmm pa’l día del….
Playa luna es de otro planeta y ojala fueran más a lo largo de nuestras costas, ya llegará el tiempo en que se podrá disfrutar nuevamente su paisaje y suavidad, mientras tanto la añoramos y nos cargamos de ganas para cuando nos encontremos otra vez……
Playa Luna…..allá voyyyyyy

Juan Carlos U.

Encuentro Naturista

Con gran afluencia se desarrolló encuentro nudista

Más de 45 personas disfrutaron de una tarde de piscina y juegos naturistas, en el marco de un nuevo encuentro organizado por el Club Playa Luna.

La cita empezó a las 15:00 hrs., en una piscina temperada del sector oriente de la capital. Las aguas albergaron juegos de pelota, nado y también relajo en alguno de los jacuzzi de las instalaciones.

Familias, parejas y amigos se dieron cita en la piscina, donde sin ninguna clase de ropa, se disfrutó de una agradable tarde de nudismo social. En el encuentro volvieron viejos participantes y también novatos. En las aguas se forjaron nuevas amistades y buenos recuerdos. 

Esta  fue la 79° cita organizada por el club, que se prepara para organizar el tercer Encuentro Latinoamericano de Naturismo durante el mes de marzo del 2012. Este encuentro se realizará en Playa Luna, V región.

En esta oportunidad  René Rojas, llamó a los miembros a participar más activamente en la organización del ELAN.

La próxima cita será el 2 de octubre, en la misma piscina.